Diario el Manaba Primer Periódico Digital De Manabí
Que opinan los extranjeros de nuestro país?
Sin duda alguna Manabí es una provincia muy distinguida por su belleza, riqueza, cultura y gran potencial productivo, que dentro de su amplitud de capacidades hay una en especial que se destaca por la gran oportunidad que representa y ésta es el Turismo sobre todo el Turismo Internacional, más aún cuando se lo concatena con los demás atractivos de nuestro país que en su conjunto significa una potente oferta que es altamente apreciada por los extranjeros.
«Ecuador es uno de los países más bellos del planeta. Está situado en la mitad del mundo y es el hogar de montañas volcánicas, selva exuberante, hermosa costa del Pacífico y las más famosas Islas Galápagos. La gente es muy amable y tiene ciudades que están llenas de vida. Ecuador tiene la flora y fauna más linda del mundo.» – así opinan los turistas de nuestro país, extraido del World Travel Award donde Ecuador batió record al ganar 14 premios el año pasado.
La industria del Turismo Internacional tiene sus propias características y ventajas particulares, es una industria limpia, capta gasto e inversión extranjera, promueve el desarrollo de la plaza, y sobre todo a nivel mundial continua en franco crecimiento.
Manabí y el Turismo
Para que el Turismo se desarrolle requiere en primer lugar de una base de atractivos turísticos, naturales y fabricados, infraestructura, servicios y accesos, todos de primera calidad. A continuación, viene la elaboración de los productos turisticos con sus respectivas rutas incluidas y finalmente interviene la gestión comercial a través de los operadores y agencias de turismo nacionales e internacionales. Todo este conjunto de elementos y acciones debe estar abrazado por una planificada campaña de promoción del destino turístico.
Manabí posee un portafolio básico de atractivos turísticos, algunos productos elaborados y cierta gestión comercial aun incipiente con un gran espacio y potencial por desarrollar. Pero debemos pensar que todo desarrollo requiere de un plan y de una inversión económica, siendo este el primer punto de partida sobre el cual debemos crear consciencia en todos los niveles de la sociedad y del país comenzando con el gobierno central quien debe declarar al desarrollo turístico como una poíitica de estado acompañada con un fuerte contingente de inversión, transferencia de conocimiento de expertos internacionales, y despliegue de relaciones públicas y comerciales a nivel mundial.
Justamente en estos días el gobierno nacional ha anunciado el proyecto de desarrollo turístico Riviera del Pacífico que abarca las provincias de Santa Elena, Manabí y Esmeraldas, proyecto que consta de 4 fases:
1ra fase: de
Puerto López a
Bahía de Caráquez
2da fase: de San
Vicente a Pedernales
3ra fase: de Muisne
a Esmeraldas
4ta fase: de
Manglaralto a Salinas.
Algunos detalles del proyecto se han presentado, el gobierno ofrece hacer una gestión de suelos que implica la urbanización, es decir la dotación de energía eléctrica, agua potable, alcantarillado y vías de acceso, de los aparentemente 3.5 millones de terrenos que comprende esta franja marítima costera, se habla también de promocionar los destinos turísticos así como atraer la inversión de las principales cadenas de resorts, habrá una lista de incentivos tales como, exoneración de impuesto a la renta por 20 años, exoneración del impuesto de salida de divisas, exención arancelaria para la importación de menaje hotelero, entre otros, pero no se ha mencionado el presupuesto a asignarse.
Cabe entonces en este momento en que la oportunidad toca nuestras propias puertas, que las Cámaras de Turismo, la empresa privada, profesionales y expertos del ramo, junto con los gobiernos locales y la academia, se reunan a fin de fortalecer esta iniciativa que tiene un inmenso potencial y cuyo máximo desarrollo dependerá de la participación conjunta de todas las fuerzas del sector. Es necesario contar con un Plan de Desarrollo Turístico para Manabí propuesto desde la propia plaza para encontrar concordancias y alinear esfuerzos con los planes del gobierno central, e incluso con las leyes que se estarían proponiendo con ciertas ventajas para estimular con más potencia el desarrollo de las provincias afectadas por el terremoto de hace 2 años.
